Sabías que 23 hrs de las 40 semanales son destinadas a tareas repetitivas y de poca relevancia
¿Qué es lo más importante que tienes que hacer AHORA?

Uno de los grandes retos a los que nos enfrentamos cada día es: ¿qué hago ahora y qué dejo para luego? Y es que cuando nos referimos a trabajo, definimos las prioridades del día, tiempos de entrega o respondemos a cualquier incidente que y volvemos a reestablecer nuestras prioridades. Pero… ¿qué pasa con las demás actividades de la vida que apartas de tu mundo por solo vivir por el trabajo?
Justamente esta semana dos personas de mi círculo cercano colapsaron. Ambas en sus cortos treinta presentaron bajones de presión arterial y dolores de cabeza. Fueron referidas al cardiólogo como era de esperarse. Con tantas responsabilidades entre el trabajo, el dinero y las tareas del hogar, intentamos ser malabaristas y salir a flote desbalanceando las necesidades vitales como ejercicio, la familia, tomar un tiempo para reflexionar y orar. Hemos creído que somos robots, no queremos detenernos a reflexionar cada día y a ser agradecidos. Este error lo seguimos cometiendo cada día hasta que el cuerpo y mente nos levanta alertas por sobre estrés y colapsamos.
De acuerdo al ¨Índice de la anatomía del trabajo 2022¨, realizado por Asana: ¨Los pormenores del trabajo aún siguen siendo una amenaza constante, con casi 23 horas de las 40 horas semanales destinadas a tareas repetitivas y de poca relevancia¨. Perdemos horas valiosas de nuestras vidas realizando tareas poco relevantes y repetitivas.
¿El trabajo remoto, puede haber aportado parte de este inconveniente?
De acuerdo a la encuesta, los empleados pierden un promedio de casi tres horas a la semana en reuniones innecesarias. Todos los días son bombardeados con aproximadamente 32 emails y cada hora, su atención se divide entre varias herramientas desconectadas y el cambio constante entre estas. La mayoría de los trabajadores están de acuerdo en que ya no existe una división entre el hogar y la oficina, sino que se trata de una combinación de ambos.
Entonces ¿qué hacer?
Cuando terminas tu horario de trabajo en la oficina la tentación constante es hacer tareas del hogar o simplemente llegar y tirarte en un sofá a descansar. Lo más adecuado es tomarme un tiempo para decidir qué tiene más importancia en tu día: ¿jugar con los niños, recoger la casa, hablar con tu pareja, estudiar, salir a tomar aire fresco, ejercitarte, o simplemente llamar a un amigo… Si nos tomáramos el tiempo, para tomar de 15-20 minutos al final del día para realizar alguna actividad que te relaje, variando cada día alguna sentirás más equilibrio.
Si tienes hijos pequeños en casa por qué no disfrutas por 20 minutos los nuevos descubrimientos que hace justo antes de dormir. En mi caso, tengo hijos pequeños, la casa tan pronto como la limpio vuelve al caos de manera increíble desde que servimos alguna comida. Antes me volvía loca, pero ahora ¿cómo impedir que mi hija de 1 año juegue con la comida y no desarrolle esas sensaciones con las texturas?
Empecemos a dejar pasar las cosas, elige, no seas tan duro(a) contigo y toma un tiempo para hacer algo que sientas debes hacer antes de entrar en tu rutina nocturna.
Permítete elegir, date el permiso para reír con un amigo, caminar en el parque o simplemente un momento a solas. El tiempo es sin duda un ganador y pasará, te des o no te des cuenta.
Trata de desconectarte de las redes cuando estes en casa. La hiperconectividad te aparta de los que están cerca y de ti mismo. Piensa en esta semana qué podrías hacer diferente que te permita sentirte calmado y en control de tu vida. Si ya lo pensaste entonces, hazlo ahora.
Cuéntame ¿qué cosas importantes dejas de hacer todos los días?